Cuando los pensamientos y las emociones que gobiernan nuestras vidas son nefastos, el miedo y los propios juicios de valor nos hacen sentir mal, por lo que siguiendo el principio de Similitud, atraemos aquello que somos.
Si nos atrevemos a cambiar el chip, apostamos por los pensamientos nobles, aprendemos a amarnos a nosotros mismos y al resto de la humanidad, empezaremos a ver como todo se transforma positivamente. Aprenderemos que el mundo es un lugar donde todavía existe la belleza y se puede ser feliz, que tenemos derecho a la abundancia, tan sólo hemos de tener la osadía de pedir y coger lo que el Universo nos ofrece.
En sólo dos años de gestionar correctamente los pensamientos y emociones, la realidad puede cambiar por completo en todos los sentidos y disfrutar de una vida feliz. Así que realmente la actitud es determinante para atraer a nuestras vidas aquella realidad que nosotros mismos creamos.
GRAN REFLEXION...
ResponderEliminarbesitos
Sí, la verdad que me ha quedado bien explicado.
ResponderEliminarTenemos que ser positivos, creer que después de los malos momentos que estamos viviendo, vendrá la recompensa, lo bueno, lo que realmente nos hará sentirnos bien.
Besos!