miércoles, 6 de julio de 2011

Todos los días son buenos para dar las Gracias

"Me sentiré agradecido cuando haya motivo para estarlo", es lo que dicen muchas personas cuando se revelan ante la idea de agradecer por algo que aun no tienen o experimentan.

Un proverbio chino dice “Contamos detenidamente nuestras desgracias y aceptamos nuestras bendiciones sin reparar en ellas”. Yo digo que cualquier momento de nuestras vidas es bueno para dar las gracias, porque cuando no somos capaces de recordar con gratitud es porque no lo hemos examinado detenidamente. De haberlo hecho, habriamos reconocido la grandeza del orden oculto que algunos filósofos y teólogos denominan la obra secreta del plan divino.

¿Que harias si solo te quedaran 24 horas de vida? creo que me responderías que dirías “Gracias” y “Te Amo” a aquellas personas que más te han aportado en la vida.
Y si te preguntara ¿Que esperas de las personas que más quieres? me responderias que te amaran y valoraran por lo que realmente eres y por tu verdadero ser. Si los seres humanos querían ser amados y valorados por lo que realmente son, el amor y el aprecio debían ser la esencia de nuestra existencia humana. Asi que era ese estado de gratitud.

La Gratitud surge cuando lo que deseamos y esperamos coincide con lo que tenemos o cuando nuestra propia voluntad o intención humana coincide con lo que los teólogos han denominado la voluntad divina o el orden oculto. Cuando sentimos humildad y agradecimiento por la divinidad, recibimos seguridad y gratitud por la humanidad. Pero que pasa cuando nuestras percepciones y emociones no están equilibradas y no reconocemos el bello equilibrio del orden divino? nuestra voluntad choca con la voluntad divina y sentimos desprecio por lo que tenemos.

Muchas personas suponen que la verdadera gratitud surge cuando perciben que sus valores individuales reciben apoyo y pueden contar sus bendiciones de una manera sencilla y superficial. Estas mismas personas tambíen suponen que la ingratitud surge cuando alguien desafía sus valores, cuando pueden contar sus desgracias. Pero esto no es más que una imagen parcial, pues la gratitud profunda y verdadera, la que hace brotar lágrimas de inspiración surge sólo cuando realmente despertamos el orden oculto y al perfecto equilibrio que hay en nuestras vidas y en todo el Universo, cuando nos damos cuenta de que el apoyo y el reto y todos los opuestos complementarios tienen lugar al mismo tiempo.

Este es el momento en que la verdadera gratitud surge espontáneamente dentro de nuestros corazones y cuando accedemos a la más poderosa fuente de amor que da lugar a la Gratitud.

Te invito a que hagas tu propio diario de gratitud y anotes todas las bendiciones que han existido en tu vida, hasta las cosas aparentemente malas que te han sucedido son tambien una bendicion porque eso te ha permitido crecer y valorar muchas otras cosas más. Gracias por seguirme en este viaje hacia la gratitud.
Que se revele el profundo poder que hay en tu interior.
Que el amor de tu corazon y la sabiduría de tu mente te guíen en tus acciones hacia tu más alta realización.

Gracias!

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